LA CONFIANZA ES LA FUERZA DEL PROGRESO DE TODA PERSONA
Confiar en alguien implica tener la certeza de que esa persona no hará nada malo contra ti, y tendrá la capacidad para hacer las cosas por amor y convicción, por eso, la confianza entre personas es la fuerza del progreso y el desarrollo. Confía quien ama de verdad, y se las juega, todo por el todo. Por el contrario, la desconfianza debilita las energías de las personas y desmotiva el avance en el progreso; es decir, nadie puede trabajar o hacer las cosas con gusto y amor cuando desconfían constantemente. Ahora bien, la desconfianza puede ser por diversas razones, la principal, sería por la traición y la mentira, entonces se desvanece la confianza y fracasa cualquier buen proyecto. A esto se suma cuando la persona en quien has confiado te da la espalda, se llena de soberbia y orgullo, y te muestra indiferencia, ignorándote del todo, claro está afianzado en otro que tiene la decisión. Al final, siempre las cosas caen por su propio peso. No hay que forzar las cosas, la verdad y el bien siempre triunfarán.
En este sentido, para que una comunidad, una institución o cualquier grupo humano progrese tiene que cultivarse constantemente la confianza, para lo cual, es oportuno hacer bien las cosas, respetar los compromisos adquiridos, tener la fidelidad a la palabra empeñada, cumplir las promesas, ser íntegros y honestos en todas las dimensiones de las relaciones humana, en suma, ser veracez.
Entonces sí, cuando hay confianza y se es leal a la persona que confía en ti, comienza el camino a la perfección y la santidad de vida. Las personas que desconfían, al margen del pecado o del mal, son aquellas que han tenido experiencias distintas de la vida, normalmente, han sido estafadas, engañadas y traicionadas, por lo mismo, proyectan su propio fracaso y frustración a los demás, y comienzan a manipular a sus borregos o dependientes, gente poco pensante y reflexiva. Lamentablemente, existe gente tóxica y resentida, que no está feliz sin hacer daño e indisponer a las personas contra otros, para lo cual hace mal uso la amistad.
La confianza es de valientes y arriesgados, porque, saben que la vida progresa sólo si hay mutua confianza, esto en todos los ámbitos de la sociedad. Quien confia se sabe amado y sabe amar; quien confía vive en la verdad y quiere que todos sean veracez, quien apuesta por la confianza es porque tiene el corazón y la mente limpia y sana; la persona que confía tiene la suficiente madurez y piensa que todos, al igual que él mismo, lo harán bien las cosas. Por eso, es mejor confiar que desconfiar, es mejor amar que odiar, es mejor decir la verdad que la mentira, cueste lo que cueste; es mejor ser honesto que ser un sinvergüenza y estafador, es mejor la sinceridad que la falsedad y el engaño, es mejor ser transparente que vivir en secretos y a oscuras. En fin, es mejor confiar en ti y confiar en el prójimo, sólo así podrás confiar también en Dios, porque, al final, cómo puedes decir confío en Dios a quien no ves, si desconfías de tu prójimo a quien puedes verlo y conocerlo mejor.
Por tanto, si quieres construir frarernidad, grupo o comunidad debes confiar en que las personas son capaces de respetarse y amarse, sobre todo, ser solidarios y caritativos, es saber confiar en la inteligencia, libertad y responsabilidad de los individuos. En unas palabras, confiar es respetar a las personas en su dignidad e integridad de vida. Es decir, aprende a mirar con ojos de Dios a los demás y no con tus ojos de perversidad; aprende a amar con el corazón de Jesús antes que tus propias pasiones bajas y limitadas; vive la vida con libertad, sabiendo que la responsabilidad es la mejor muestra de lealtad y fidelidad a la palabra empeñada. Confía plenamente en la gente buena y recta, y no desconfíes de nadie, porque con la medida que midas se te medirá. No olvides que la vida es reciprocidad, lo que siembras, tarde o temprano, has de cosechar. No olvides, que si confías en los demás estas en el mejor de los caminos, si desconfías ten por seguro que ya estas intoxicado y enfermo por la malicia. Vive y ama de verdad, entonces florecerá la confianza como la fortaleza del progreso personal y comunitario. (Marcos)
+ P. Marcos Trujillo Reaño Osj
17 de agosto de 2019